Para Losantos, terminar contra la crispación es como decir, “muerto el perro, se acabó la rabia”, y calificó a los firmantes como “fusiladores analfabetos”. En su opinión, “la historia del siglo XX ha sido la historia de la abyección de los intelectuales, ningún gremio ha sido tan nefasto para las libertades como los intelectuales occidentales. Están siempre con las dictaduras”. Reprochó al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón que diera al Círculo de Bellas Artes, lugar en el que se presentó el manifiesto, una emisora y mil millones de pts