Quizá la literatura – tanto la digitalizada como la digital- debería modificarse sustancialmente. Serían textos fragmentados, de pocos capítulos y además cortos, con tramas simplificadas, historias que no se desarrollan, breves pinceladas de los personajes, mini textos, cuentos hiperbreves, una literatura de spot, historias tipo anuncio, condensadas, fragmentadas, de retazos, de consumo rápido, aspecto más de película que de escritura.