El presidente de facto hondureño, Roberto Micheletti, quien usurpó el poder tras ejecutarse el 28 de junio un golpe de Estado contra el mandatario legítimo de la nación, Manuel Zelaya, prepara una amnistía tanto para él, como para todos aquellos que apoyaron la ruptura del orden constitucional en el país. "Tenemos que perdonarnos todo, yo creo que podría ser un paso hacia eso", dijo Micheletti, en referencia a la amnistía que pretende que el actual Congreso.