Sobre todo son los sueldos de los profesores y el resto de trabajadores de la enseñanza los que soportarán los recortes en educación a cuenta de la crisis económica. Pero también se limarán, dependiendo de la comunidad, desde el transporte escolar a las becas universitarias, la formación del profesorado, el gasto en publicidad, las infraestructuras o las actividades extraescolares, además de adelgazar la publicidad, los gastos administrativos e incluso luz y agua.