Este plato tradicional cubano tiene como principal ingrediente la yuca, un tubérculo que procede de un arbusto que se cultiva en los países tropicales de América, Africa y Asia. Presenta una carne de color blanco, recubierta por una corteza de color pardo o marrón oscuro y de aspecto leñoso. Es muy rica en hidratos de carbono complejos, pobre en proteínas y grasas, y muy buena fuente de vitaminas del grupo B (B2, B6), vitamina C, magnesio, potasio, calcio y hierro.

Una sopa de verduras no tiene por que ser aburrida, sencilla pero diferente, esta es una sopa de tuberculos y raices llena de sabor y color. Apoyada en el sabor principal de la patata y el ajo, permite saborear cada tuberculo de una manera distinta a la de siempre.

Es seguramente las patatas fritas son el acompañamiento perfecto para casi cualquier carne, pescado o hamburguesas, pero a veces, un pequeño cambio es realmente espectacular. ¿Queréis triunfar con una guarnición de yuca frita? Os pasamos las bases para hacerlo.

Una de las guarniciones más socorridas que tenemos en casa y en la mayoría de restaurantes (tanto de comida rápida como de algo más lenta), las patatas fritas, pero ¿y si las cambiamos por otro tubérculo menos famoso pero más sabroso, la yuca? Sólo hay que tener una pequeña precaución

Si bien en España, a la hora de armar un plato con su porción de proteína y vegetales frescos, con un carbohidrato, se piensa automáticamente en patatas. Sucede en otras regiones del mundo y especialmente en América Latina, África y partes de Asia, que la respuesta con frecuencia es yuca.

La yuca con chicharrón es uno de los platos tradicionales más destacados de la gastronomía de Honduras y El Salvador, aunque esta rica combinación también se disfruta en otros países de Latinoamérica ¡y es que está buenísima! Lo mejor es que lucirte en casa preparando un chicharrón crujiente y una yuquita perfectamente frita es más fácil de lo que piensas.