La "conciliación de la vida familiar y laboral" no existe. Sencillamente, mientras estás haciendo una cosa no estás haciendo la otra. Y por tanto la famosa "conciliación" a fin de cuentas se reduce a "Elige: familia o trabajo. Si prefieres trabajo, te facilitamos una guardería. Pagando, claro. Si prefieres familia, te damos un permiso. Sin sueldo, claro". No veo más solución que la de los países escandinavos: un permiso mucho más largo, y con sueldo.
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