La Comunidad de Madrid admite errores en la actuación de un colegio público con varias denuncias por acoso escolar

La Comunidad de Madrid reconoce que hubo "errores" en la actuación del colegio público Cardenal Herrera Oria, cuya directora terminó dimitiendo tras varias denuncias por acoso escolar. En un audio la viceconsejera de Organización Educativa, María José García-Patrón, admite que deben "corregir actitudes que teníamos que haber corregido antes. Hay cosas que ya le hemos dicho a la directora –la nueva es la antigua jefa de estudios– que no se pueden repetir. Ella lo ha reconocido. Vamos a corregir actitudes que teníamos que haber corregido antes."

[#1 mlaus]

Cada vez que sale una noticia de éstas, flipocon la reacción de algunos. Ya sabemos lo que está haciendo el ppsoe con la educación pública, quitándole recursos, subsidiando la privada, etc. Muy malo todo, estoy de acuerdo. PERO, ¿y los niños acosados? ¿Y el clima de violencia y de desamparo? Estos problemas hay que pararlos en seco, a los acosadores hay que pararles los pies, separarles por un tiempo del resto si no mejoran, reeducarlos, etc, con todos los recursos necesarios, pero protegiendo siempre al acosado, por encima de todo. Y si las familias de los acosadores no son capaces de educar a sus hijos en un clima sin violencia, hay que estudiar separarlos temporalmente de ellos, darles unas educación en otro clima... alguna oportunidad en la vida.

[#2 Licotero]

Joder, pues a mí me ha sorprendido positivamente la dimisión. Conozco un caso en Zaragoza de un instituto público con un serio problema de homofobia y violencia en general, con suicidios de por medio y todo, cuyo director se jubiló hace bien poco después de décadas en el cargo.

[#3 AlexCremento]

Blablablablabla. Ninguna Consejería de educación y ningún partido político está dispuesto a solucionar este problema de verdad. Para ellos todo se debe resolver con diálogo y buenrollismo. Mientras no nos quitemos eso de la cabeza no hay nada que hacer.

[#4 AlexCremento]

#2 Desde mi desconocimiento de la realidad del centro igual es que el problema no era el director sino el alumnado y las mierda de leyes que tenemos.