La paralización parcial o total de un gran número de actividades productivas como consecuencia de la COVID-19 ha generado un hundimiento de los niveles de facturación de gran parte del tejido empresarial y una reducción drástica (o total en algunos casos) de los ingresos percibidos por muchas familias. Como consecuencia, el PIB ha sufrido un desplome del 5,2% en el primer trimestre del año, mientras que el Gobierno prevé que la caída anual alcance el 9,2% y la tasa de paro ascienda al 19%.
|
etiquetas: crisis , economía coronavirus , solidaridad