La historia nos enseña que cada vez que la derecha catalana ha visto amenazados de verdad sus intereses ha sido implacable. Con formas muy diversas -brutal o inteligente, en función del contexto histórico-, pero siempre implacable. Lo fue en la década de 1920, cuando respondió a la amenaza de la CNT armando pistoleros con la aquiescencia de las autoridades y propulsando desde Barcelona al general Miguel Primo de Rivera para que pusiera orden en toda España.
|
etiquetas: ada colau , historia , derecha , cataluña