OLEIROS, Portugal — En junio, el incendio forestal más devastador en Portugal mató a más de 60 personas; pero para Daniel Muralha, quien vive cerca de la zona afectada, fue tan solo el roce más reciente con la muerte. En 2003, Muralha, de 77 años, apenas se salvó de un gran incendio forestal que consumió su casa. En 2015, un incendio destruyó su parcela. Y este año, en julio, observó con preocupación cómo el fuego quemaba los árboles justo encima de su propiedad.
|
etiquetas: portugal , incendios