En una entrevista explica que el primer frenazo en seco de la carrera llega durante el embarazo porque «parece que hay un handicap por el que no te quieran ver saliendo en cámara». Una vez que las mujeres dan a luz la situación no se normaliza y se exige a las recién parturientas reincorporarse a los cánones de belleza con premura. «Tengo que perder 13 kilos en 8 semanas», ejemplifica la artista, madre de tres criaturas fruto de su matrimonio, ya extinto, con Brian Austin Green.
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Hipócrita!
Alguien tenia que decírtelo.
Por tanto, los salarios de las mujeres, que tienen menos años de trayectoria, deberían ser muy superiores. Por oferta-demanda. Esto es algo que tiene que calar entre las actrices (y sus representantes) para que exijan lo que merecen.
O lo haces o no trabajas.
De hecho, años después alguien rescató la entrevista y eso la sacó de la saga transformers.
Podría entender que la engañaran una vez, no toda su carrera. Y menos aún habiéndose pasado media vida vendiendo posados en bikini.
El problema que tiene Hollywood es que prima la belleza física sobre las capacidades de actuación (tanto en hombres como en mujeres, aquí no se salva nadie. De acuerdo que en mujeres más, sí, pero no vamos a ser hipócritas: todos podemos nombrar a más de cuatro actores que están ahí porque son del gusto social aceptado pero que no transmiten nada). Naturalmente, en cuanto empiezan a tener edades que comienzan con un cuatro o hasta con un tres, ya no mueven la misma cantidad de pasta. En cuanto engordan un gramo, se quedan en estado, empiezan a tener canas o a perder cabello, ya no mueven la misma cantidad de pasta, ya tienen detrás a otro que les mueve la silla, ya no son los niños o niñas bonitas que tenían contratos para escoger y revolver. Han perdido lo único que les hacía apetecibles, que era su juventud y su belleza.
Hollywood es una carnicería. Allí, si no tienes un talento fabuloso para actuar, más vale que te retires cuando aún estás en la cresta y puedes irte por la puerta grande. De lo contrario, lo que te espera es que te hagan salir por la trasera a empujones mientras te asombras de lo que te ha sucedido y te lamentas diciendo "yo era alguien, a mí me adoran, esto tiene que ser un error...".
Lo mismo pasa con los actores, que los hay que lo son y otros son cachos de carne.
No los tiene que perder ... que se presente a papeles que cuadren con su situación fisica y personal en este momento.
Es como si yo me presento a bombero ... no va a funcionar
A los actores malos no. De lo que se aprovechan algunas actrices malas es del sesgo sexista por el que consiguen un papel por ser más jóvenes y tener mejor cuerpo que mejores actrices, que se encuentran sin papeles que hacer.
Esto es, entre otros motivos, porque las actrices están más en calidad de objeto decorativo que de personaje relevante. Si quieres hablamos del test de Bechdel.