Se intensifica la caída de la población en España, que vuelve perder habitantes por segundo año consecutivo. En 2013 el número de habitantes en el país disminuyó en 220.130 personas y se situó en 46.507.760 a 1 de enero de 2014. El número de habitantes cayó en todas las comunidades autónomas, salvo en Baleares y Canarias, donde creció ligeramente, así como en Melilla.
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Supongo que es un efecto lógico de la crisis: la necesidad cada vez más acuciante te obliga a salid por patas si aquí no hay oportunidades ni futuro. Es posible que en el futuro caiga más todavía.
Por mucha gente joven que entre, si no hay trabajo, los 4 que trabajamos no vamos a poder mantener al resto.
Que faltan puestos de trabajo es una evidencia y es por donde hay que atajar el problema facilitando la creación de nuevas empresas en base a medidas socialmente coherentes para ello.
Si no hay trabajo tiene que sobrar gente, sepa mal, o no. Y si la gente se sigue yendo, parece que, de momento y hasta que haya algún gobierno competente, es la solución. Aunque nos pese.