Pese al respaldo que le supone contar con un grupo parlamentario ampliamente mayoritario, el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, acaba la legislatura batiendo todos los records de gobernar a golpe de decreto. Precisamente, el 35 por ciento de las iniciativas legislativas enviadas por su Gabinete a las Cortes fueron decretos-ley. Su antecesor José María Aznar no se atrevió a tanto: llegó al 20 por ciento en la segunda legislatura, también con mayoría absoluta, y al 33 en la primera.