Si la memoria individual ya tiende a ser falible y a autoengañarnos, en el caso de la colectiva estos sesgos y caprichos aún se acentúan más: “El conocimiento se puede perder en tres generaciones”, aseguraba el historiador económico Santiago M. López. La crisis provocada por la COVID-19 se nos aparecía como un suceso excepcional cuando, en realidad, más que ante un cisne negro nos hallamos ante una catástrofe anunciada.
|
etiquetas: historia , pandemia