Una mujer escocesa acusada de perseguir a su víctima durante varias millas para darle un puñetazo podría librarse de la cárcel si demuestra que sabe tejer. Según la acusada, la persecución es una mera coincidencia - ella se dirigía a una tienda especializada en algodón. Al oir eso, el sheriff le planteó un reto: Debe volver en unos días con varias prendas con calidad suficiente para ser vendidas por una organización caritativa que pueda conseguir fondos para varios proyectos. De esto puede depender libertad o cárcel.
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