El llamado "genocidio" en la región autónoma uygur de Xinjiang, en el noroeste de China, es una acusación completamente falsa, una mentira inventada por algunas fuerzas anti-China y una farsa escenificada para difamar y profanar a China, informó hoy miércoles el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Zhao Lijian. Zhao hizo estas declaraciones en una rueda de prensa cuando se lo consultó sobre los informes del Ministerio de Relaciones Exteriores japonés que dicen que el gobierno no cree que China haya cometido "genocidio" alguno.
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Todo el mundo sabe que los musulmanes que hacen frontera con Afganistán nunca se meterían en cosas de terrorismo, islamismo ni radicalismos varios. De hecho aquello es un paraiso de democracia y entendimiento.
Al igual que los esclavos de los lamas del Tibet, estaban encantados de estar al servicio del Dalai y su camarilla.
No como esos putos musulmanes de Birmania, perseguidos con el benplácito de EEUU.