edición general
  1. @Azulito Para mí las ofensas solo duelen cuando hay cimiento que la sustente.
    Si alguien me llama pelirrojo y no lo soy, jamás me podré sentir ofendido.
    El poder que "tiene" el que desea faltar a tu respeto emana de tí.
    Si no se resiente tu honor con sus vanas palabras, el sendero que dejarán tus huellas al caminar podrán ser seguidas por cualquier persona que desee conocer tu camino.
    En cambio, las palabras vacías de respeto no dejan huella, pues eres tú quien pisa.

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