En Kenia la Organización Mundial de la Salud se ha decantado por hacer pruebas masivas en un estado sin sistema de asistencia sanitaria pública efectivo. Los suburbios de Nairobi, sin alcantarillas ni recogida de basuras, son zona de alto riesgo. Mantener la distancia física está fuera de la realidad diaria. Vecina a Kenia, Somalia sufre la enfermedad en un previo estado endémico de guerra y la presencia de malaria y cólera. Y además sequía, plaga de langosta; lavarse las manos es un imposible cuando el agua está contaminada.
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