Con un “¡viva España!” y al son del himno nacional, el Ayuntamiento de Madrid izaba a primera hora de esta mañana su última bandera gigante de la legislatura. Lo hacía en la Plaza de España, en una de las zonas ajardaniadas junto a la Torre de Madrid, con abundante presencia militar y las miradas de Isabel Díaz Ayuso y de José Luis Martínez-Almeida. El alcalde cumplía con este acto un ciclo que comenzó en diciembre de 2019 y que ha llenado de rojigualda una buena parte de los distritos de la capital.
|
etiquetas: almeida , bandera de españa
youtu.be/wXcBTduto5k
Que cojones.
Dicho esto, lo de poner banderolas gigantes esta muy alto en la lista de catetadas, pero si gobiernas por y para la masa de catetos embrutecidos este tipo de acciones son muy productivas desde el punto de vista político.
Y viva España, que con sus cosas malas es un buen país para vivir, pero garruladas patrioteras para enardecer a la masa de idiotas no, gracias.
Y no, no estoy reivindicando, precisamente los proyectos de la derecha (si es que tienen alguno), estoy zarandeando a las izquierdas posmodernas de este país y los proyectos balcanizadores.
Yo no estoy en contra del estatismo (aunque mis reminescencias anarquistas de la adolescencia sigan presentes) pero si del nacionalismo por ser un movimiento que apela al populismo más visceral e irracional, mientras que el estatismo es integrador, racional y pragmático, y prácticamente la única defensa posible frente al corporativismo transnacional y global capitalista.