En las reuniones secretas de Bilderberg se decide el destino del mundo. Si no tienes el honor de ser invitado, simplemente no existes, no eres nadie. El objetivo del Club es acabar con nuestras libertades personales y manipularnos mediante un único gobierno mundial establecido en la ONU. ¿Cómo es posible que Google, Nokia, Coca-Cola o el FMI puedan cambiar nuestras vidas? En este libro políticamente incorrecto, Cristina Martín Jiménez desvela las últimas mentiras fabricadas por los «bilderberges» para mantener a la población atemorizada...
|
etiquetas: club bilderberg , titiriteros , élites neoliberales , google , fmi
Sirva esta frase como resumen de este panfleto (conspiraciones, aborto, exageraciones del cambio climático, etc).
Es que parece que lo hagan a posta para desacreditarse. Podrían haber escrito algo interesante hablando del famoso club pero es una especie de batido de conceptos y biliis. Hasta que llegas a la frase "se cuenta que conocen y tratan con extraterrestes" y ya te tomas el resto como un chiste o un troleo...
Y si no, busca en la historia de la humanidad... Cuándo se ha juntado la gente de poder para conservarlo? Exacto.
¿Cómo es posible que Google, Nokia, Coca-Cola o el FMI puedan cambiar nuestras vidas?
Nokia ya no cambia ni una bombilla
estos no han entrado en una cocina ni por accidente.
El tema de las conspiraciones es brutal. Recuerdo, creo que era en un documental de Adam Curtis, que agentes mismos del gobierno de EEUU admitian haber soltado algunos bulos, o hacerlos parecer "posibles", por que por muy absurdos que fueran, preferían que la gente les creyera omnipotentes y omnipresentes. Un pez que se muerde la cola y del que és prácticamente imposible sacar algo en claro dada su naturaleza.
Una conspiración sin Reptilianos, iluminati, masones y opus dei o tal vez todos juntos...
La agenda de la reunión es pública, y asiste gente muy dispar y random cada año; hasta Esperanza Aguirre fue asidua.
Las opiniones de los debates son privadas dado el carácter público de las personalidades que aparecen. Es entendible; piensa que un político por ejemplo nunca va a decirte lo que de verdad opina sobre un tema, dirá lo que convenga a su partido y a su carrera política. Por eso los debates políticos son puro teatro y nunca se llega a ninguna conclusión real ni al consenso: nadie convence a nadie ni nadie va a cambiar su opinión, se trata sólo de convencer a votantes, no de buscar un consenso sobre el bien común.
En las reuniones del club, el debate es más sincero y se trata de formarte una opinión con al menos cierta libertad sin tener que preocuparte de que vaya a afectar a tu carrera política o empresarial o a tu imagen pública.
Cada asistente se va con sus conclusiones a título personal a su casa, y ahí se termina. Por el momento tú sigues votando cada 4 años y eso, amigo mío, es lo que de verdad cambia las cosas.