Hasta los 80, la ropa que te compraba tu madre contaba con estrictos canales de abastecimiento. Y en la cúspide de la chabacaneria el chándal de táctel. Se trataba de una prenda con sus dos partes, forro y exterior, cuya principal virtud era que no engañaba a nadie. Si cuando la comprabas te podía parecer una gran mierda, al desembalaría ya en tu casa, lo mirases por donde lo mirases, aquello era una verdadera inmundicia. Para poder entender el furor ochentero del chándal de táctel, hemos de enumerar sus ventajas:
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etiquetas: 80s , ropa , chandal , táctel
como el de Hugo Chávez
con mocasines le da un toque glam!
Te estirabas se reventaban las hechuras.
Todavía no se como sustituyó, temporalmente, a la ropa de algodón.
Habrá que ver si en 40 años se ponen de moda otra vez
Aunque lo de las quemaduras de chinazos de porro es pura verdad.
Mira como brilla el táctel qué suavidad
Hey nena, aparta tu cigarro ostia
Que se puede inflamar
Yonkis y rumanos me saludan al pasar
Para los curiosos, compró uno de tela normal de toda la vida, gris, y yo encantado
Mucho mas elegante que la mayoría de modelitos de las pasarelas por los que hablará "maravillas".
Y además, cumplía perfectamente su función de ser cómodo.
En mi clase tuvimos todos, mi madre incluso me hizo alguno con telas "guapas". Yo no me veía mal otra cosa son algunos diseños que había por ahí...
Peor fue la moda de los pantalones a cuadros, vergüenza ajena algunas fotos del pasado...
Luego vinieron los chándales de pelito de un solo color
Estábamos en el mercadillo de mi ciudad y mi madre estaba mirándome un chándal en el montoncillo. Ella ya me había escogido uno de los "clásicos" pero yo me había quedado mirando un chandal de una especie de material espacial del siglo 37.
La dependienta dijo "a ti te ha gustado este... el Táctel es un chandal nuevo de una nueva tela". Era sensiblemente más caro que el que había escogido mi madre, pero aún así me lo compró.
Mamá, no te mueras nunca
Vizcaíno detectado.
P.S. Aún lo tengo, al menos la chaqueta...
www.coolaccidents.com/sites/g/files/g2000010276/files/oliver%20tree%20
El de la ciudad, no el del equipo de fútbol.
" Como decían las amamas, tenía buena vejez. En caso de rotura en forma de siete, cosa habitual por la pésima calidad del táctel, admitía perfectamente unos parches guapos de Bultaco, Sport Billy u Oliver y Benji, asaeteados en el calor de la plancha. A pesar de lo cutres que quedaban daban un toque de futurismo al chándal, en una especie de predecesor del mono de los corredores de Fórmula 1."
Muchos de nosotros lo tuvimos porque era lo más humilde... Lo que nos podíamos permitir.
Lo de ahora es otro rollo.
El mío duró muy poco. No es que yo planchara a menudo, pero me tuvo que nacer la iniciativa con ese engendro inflamable...
Y eso que no era especialmente feo.