Desde que comenzó la crisis económica se ha dado una importancia, a mi juicio,exagerada al paro juvenil. Una persona con veinte años en la actualidad tiene un largo camino por recorrer, tanto en su vida personal como profesional. En cualquier conversación donde lo normal no sea que todos estén trabajando, el comentario “qué ocurre con la gente de más de cuarenta, ¿son invisibles?” es el habitual, es la pregunta del millón.
|
etiquetas: encontrar , empleo , cuarenta y cinco , odisea , discriminación