LAB ha informado este viernes de la muerte de un trabajador de 25 años en la empresa Productos Tubulares de Trapagaran. Según ha informado el sindicato, era empleado de Langoitia Estructuras Metálicas, una subcontrata de Igorre. El trabajador se encontraba en un tejado cuando ha caído desde una altura de entre 15 y 20 metros.
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Siempre se pueden colocar líneas de vida provisionales como en la imagen.
Aunque es cierto que requieren mucho control, precisamente debido a esa temporalidad.
Siempre hay soluciones. Simplemente hay que pensar en la consecuencia del accidente a evitar, y será viable sin duda esa solución.
En la instalación de torres de altas tensión, sector eólico, etc, estás constantemente trabajando en alturas, y sí, estás trabajando sin soltarte de las líneas de vida. Y en el caso de estar en la obligación de soltarte de dicha línea de vida, antes de ello se debe conectar uno de los mosquetones a un punto de seguridad ya definido con soporte estructural suficiente en caso de caída.
Existen sectores en los que por los motivos que sean, se les da menor importancia a estos asuntos. Ya sea por (in) cultura empresarial, falta de concienciación laboral y recursos limitados.
Pero eso no quiere decir que sea imposible. Simplemente, será más "complicado" o "engorroso" mantener todas las medidas de seguridad.
Al final todo esto trata de mentalizarse. Es como un seguro, del que sólo te acuerdas de su necesidad o del que te arrepientes de no tenerlo cuando tienes que recurrir a ello.
Pero ese día que recurres a ello, te salva la vida entera.
Recordemos la obligatoriedad del uso del cinturón de seguridad. Tuvo que ser "forzada" hasta que se inculcó esa cultura.
Lo cierto es que cuando te resbalas y te sujeta la línea de vida, o cuando tropiezas y te agarra el extensor retráctil, ahí ves que has vuelto a nacer.
Mejor experiencia que esa para ver la necesidad de dichos elementos de seguridad, no existe.