El bochorno se ha consumado. Dos meses después de que siete selecciones europeas, entre las que no está España, solicitaran formalmente a FIFA usar en el Mundial un brazalete con la bandera arcoíris, la respuesta formal ha llegado con el torneo ya empezado. La FIFA amonestará con una tarjeta amarilla a todos aquellos jugadores que lleven el brazalete de 'One Love'.
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Todos sabemos que censurar bien es muy pero que muy difícil. El problema se soluciona con la imaginación que proporcionan años de dictadura.
Berlanga debería explicarles a los jugadores lo que es una calcomanía.
Al menos con el fútbol se ha puesto en el foco en la falta de libertades y el pisoteo de los DDHH de aquellos países.
Lo de esperar que unos deportistas veinteañeros con baja formación encabecen una revolución social cuando ni sus propios compatriotas les respaldan, es de traca. Por cierto, los jugadores van sin cobrar, y solo ganarían pasta si cumplen con el objetivo. Y sí están obligados a acudir, de lo contrario tendrían sanciones.
me cago en su puta madre cuandome acuerdo)es.wikipedia.org/wiki/Inmigración_ecuatoriana_en_España
La comunidad ecuatoriana en España en 2021 es la tercera comunidad extranjera más importante en el país con unas 416.323 personas
Es más, en temas futbolísticos es difícil encontrar un colectivo más alejado en mi humilde opinión.
La FIFA tirará adelante con lo que hay, no le queda otra que tragar con su decisión errónea en la elección de Qatar. El mundial saldrá adelante y ya está. Supongo que al menos la FIFA habrá aprendido la lección.
Hay que vender!!!
Si te sacan la tarjeta arcoiris, te tienes que morrear con el jugador del equipo contrario
El dinero es lo único que les duele, si la gente fuese capaz de organizar un boicot público a todas la marcas deportivas que participan en el mundial si pretender tomar represalias contra cualquier jugador que proteste contra el gobierno catarí, enseguida se acababan las tonterias.
Deberían haber pasado de ir, y dejar que se retratara el poder establecido en todo su esplendor. Habría sido interesante ver a la opinión mediática poniéndose en contra de un Cristiano Ronaldo o un Lionel Messi que no quisiesen ir a jugar por conciencia.
El problema es que los principios cuestan dinero y carreras y no lo van a hacer: con un gesto a la galería es más que suficiente para ir adelante.
Y por finalizar, tendríamos que ponernos en esa situación para ver cómo reaccionaríamos, no es una decisión sencilla por muchos millones que tengas en el banco, de ahí testear los principios,