El pasado lunes de Pascua, David Broncano, Ignatius Farray y Don Héctor de Miguel Martín —alias Quequé—, el trío de cómicos que conducen desde 2014 el espacio de humor satírico 'La Vida Moderna' en la Cadena SER, dieron por concluida la etapa de no ofensa del programa, extendida durante varias semanas, al grito de ¡Spontiak!.
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etiquetas: huelva , ofendiditos , commedia , la vida morena 
"Si te sientes ofendido, que te follen."
Eclesiastes 7:9
Cómo mola la gente que se rie mientras se "ataca" a otros y se ofende cuando les toca a ellos.
Llamaron a la gran Martirio, un respeto por favor.
youtu.be/5vY-Vly-qlw
¿Y quién debería ponerlos? ¿Tú? ¿El Ministerio del Chiste? ¿El gobierno de Huelva?
Que grandes los murcianos que encima se lo toman con humor y eso que se meten con ellos hasta la extenuación
No se metieron con la ciudad, dijeron la verdad. Otra cosa es que sea bonita o no (al menos para mi la provincia si lo es), eso es discutible,
Vivimos tiempos convulsos.
Disclaimer
En el contexto del programa tiene mucha gracia: hablaban de que Carolina Marín, campeona del mundo de badminton es de Huelva, la casualidad que esta vez el mundial es allí. Imaginaban que lo había preparado todo ella para desanimar a sus contrincantes con la visión de la ciudad.
Si se hubieran recreado en lo preciosa que es Huelva, seguramente hubieran generado más commedia. Con esto se dice todo.
“Tú sientes cuando puedes decir algo, pero también cuando has metido la pata antes incluso de terminar la frase. La comedia es un arte porque tiene esos límites, no todo vale”, comenta Ignatius.
¡Viva el vino!
Curiosamente aquellos que más abanderan los límites a la libertad de expresión son aquellos, que por poner un ejemplo, más trabas pusieron al matrimonio homosexual. Y no lo digo en ningún modo en una manera de incluirte en ese grupo, si no para que veas que lo que te hace racista o homófobo no es el sentido del humor, si no tus actos.
Se nota que no escuchas el programa, ni sabes de que va el tema.
Otra cosa es que haya “humor” que perpetúe opresiones, como el humor racista, xenófobo, homófobo y machista. Ese tampoco quiero que se censure, lo que no quita que haya que criticarlo para abolirlo.
...Es tan difícil que tú me quieras
como que gane el Recreativo de Huelva...
www.youtube.com/watch?v=T-kI6OMyk0M
A mí me dan pena todos esos cargos públicos onubenses haciendo declaraciones o comunicados ofendidos por lo que se vierte en un programa así.
Fdo: Un alcarreño
Tal vez sea que como todo el que sale de Lepe a los pocos KM se encuentra un cartel de Huelva, todos los que tienen sentido del humor nunca llegaron a Huelva
Y por favor, que ningún onubense se sienta ofendido por mi comentario, estoy seguro que la inmensa mayoría de los onubenses tienen un gran sentido del humor, lo que si tendría que ofenderles en realidad es que tenga que aclarar este comentario, pero con los tiempos que corren, más vale hacerlo.
Que para mí uno de los mejores cómicos del momento es Judah Friedlander y llega a ser muchísimo más ofensivo que La Vida Moderna al completo.
Es cojonudo que de todo el mensaje saques una conclusión así. Más cuando hablo de las diferencias de saber leer y la comprensión lectora.
Y no, me refería a límites lógicos como xenofobia, homofobia y etc.
Pero te lo explico: abolir significa crear las condiciones sociales necesarias, sin prohibir ni censurar absolutamente nada, para que la sociedad vea las consecuencias de ese humor racista/homófobo/machista, es decir, la de perpetuar opresiones, para que, de motu proprio, deje de hacer dicho “humor”.
Si a estas alturas crees que abolir significa prohibir, igual era mejor que hubieras leído la definición antes de poner el comentario.
What?
#53 Me encanta la zona de Aracena
Eso sí, yo llevo toda la mañana moviendo papeles al ritmo de What lovers do.
Esa es mi opinión, si a ti te gusta lo respeto, y respeta que a mí no me guste.
Yo dejé de escuchar el programa por él hace ya tiempo, así que no sé si ahora trabaja más que ninguno.
Por ejemplo me gustaron mucho el muelle del Río Tinto, la Casa Colón, las vistas de la ría de Huelva desde el Santuario de Nuestra Señora de la Cinta, la Plaza de las Monjas (y la avenida peatonal de Martín Alonso Pinzón que sale desde esta plaza) o la escultura del Monumento a la Fe Descubridora (más conocido como el Monumento a Colón). Y eso sin olvidar el pintoresco Barrio Reina Victoria, un barrio obrero perteneciente al movimiento urbanístico de las ciudades jardín y construido por las compañías mineras británicas para sus trabajadores.
Solamente poder observar la ría de Huelva, en la que confluyen los ríos Tinto y Odiel para desembocar en el Atlántico, es suficiente para no considerar a Huelva como una ciudad fea. La tranquilidad y paz que se siente al ver ese entorno natural es algo que no tienen muchas ciudades.
En mi opinión Huelva tiene una fama negativa inmerecida, quizá por verse eclipsada por el resto de maravillas que pueden encontrarse en la provincia.
Las bromas están ancladas en creencias populares y yo no se e donde viene ésta.
Porqué si no puedo decir por la radio, Mira un Soriano que le gustan los melocotones.