Lo primero que le prometo a Miguel Ángel Hernando, Lichis, es que no voy a titular la entrevista con algo de La Cabra Mecánica. Él lo agradece tímidamente, como se hace con un favor no pedido. Está en un momento de su carrera y de su vida en el que necesita salir adelante como sea y huir de las etiquetas y los estigmas del pasado. Sinceramente, desde que le conozco, siempre ha estado en ese momento, siempre pendiente de no encasillarse, revisando continuamente los errores y los aciertos, las causas y las consecuencias (...)
|
etiquetas: música , entrevista 
Es curioso que te insulten y te llamen machista y maltratador por defender la custodia compartida.
Por cierto, ¿dónde están los hijos de Juana...?
Pues ya está dicho casi todo.
Y que conste que el trabajo con la María ( Jimenez ) me parece sublime
Como se ha dicho siempre, talento no es pegar el pelotazo y ya, talento es mantenerse. Y si no te mantienes, reinventarse.
Un colega del mundillo siempre dice que cuando se es una "meretriz del arte" (la música, literatura, etc) hay que ser consecuente, más que nada, porque es lo que paga las facturas.
Si la gente le pedía "La lista de la compra", "No me llames iluso" o "Felicidad" , copón, dáselo. El público no va a un concierto a sorprenderse, va a escuchar lo que saben que le gusta. Anda que no tiene que estar Sabina hasta la polla de "Princesa" o Serrat de "Mediterráneo". Y sacan disco nuevo y salen de gira y siguen cantando las mismas canciones.
Después mis prejuicios hicieron que no escuchara más discos de ellos hasta que sacaron No me llames iluso y Felicidad, dos de las canciones que más habré escuchado en algunos momentos de mi vida, por mucho odio que su autor parezca tenerles. Incluso la del cupón era muy buena, muy efectiva y bien construida, aunque según tengo entendido ni siquiera la compuso él, sino que se la dieron ya hecha los de la ONCE para que la cantara.
A mí la sensación que me ha dado la entrevista es que Lichis es de esos músicos que, a pesar de contar con un gran talento, tienen entre ceja y ceja que el verdadero glamour y autenticidad de un artista es el fracaso, la quiebra y la derrota, y hacia esto se obstina en dirigirse por muy buenas cartas que le pueda dar la vida en un momento dado. Y es una pena, porque conozco más de un caso así y sé lo difícil que es salir de ese marco mental autodestructivo.
Es fácil, si no hubiese sonado la lista de la compra, sería un total desconocido, y eso que incluso con esas poca gente le conoce