... se deduce que el temor a ser mordido por el que viene detrás es el factor principal del inicio del movimiento colectivo en las langostas. Este reflejo defensivo crea un efecto dominó al provocar que durante la marcha, una langosta toque el abdomen de otra haciendo que la segunda se mueva y toque el abdomen de la siguiente que también tratará de moverse; aquellas langostas que no se muevan corren el riesgo de ser devoradas por sus congéneres. De esta forma tan simple se consigue que millones de individuos marchen en la misma dirección ...
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Justo lo contrario de los humanos, que con las conductas egoistas logran salir todos en tropel sin organización. Otro punto más a favor de los animales ¿irracionales?