A partir de ahora, los kernels numerados 2.6.(impar) serán versiones "inestables", y no se aceptarán nuevas funcionalidades para el siguiente kernel par, sino que sólo podrán corregirse bugs. La idea, original de Alan Cox en la Linux Kernel Mailing List, ha recibido el visto bueno de Andrew Morton y Linus Torvalds.
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etiquetas: kernel , linux , versiones , numeración
Lo que dice #2 es cierto.
Deberiamos usar la ley fundamental de la informática que dice:
"Si algo funciona, ¡¡¡NO LO TOQUES!!!"
Ahora, todas las versiones 2.6.x son estables, sean pares o impares...
Está por ver si de verdad se implanta lo que dicen, sólo hace falta recordar aquella historia que decía que iba a haber una release solo para arreglar los bugs (no encuentro el enlace en kerneltrap), al final no la ha habido todavía.