Al sector del ladrillo le ha salido una nueva competidora. La última revolución en el mundo inmobiliario se encuentra en un material tan sencillo, barato y ecológico como las balas de paja, esos montículos de desecho vegetal que se amontonan en los campos de cultivo. Ventajas, el grosor de los muros será de 35 o de 50 cm, las balas transpiran mejor que la mayoría de los materiales, lo que contribuye a mantener la calidad de aire interior... En España aún no estan reconocidas legalmente. Mas info:
www.casasdepaja.org