Tuve un infarto en diciembre de 2015 y gracias a eso me quedé vivir en la Argentina. Fue un infarto que me dio de sopetón a los cuarenta y cinco años y casi me muero. Yo estaba alquilando una casita en Montevideo, por AirBNB, y los dueños de esa casa me salvaron la vida. Me subieron a un auto, llamaron a un patrullero, me llevaron al hospital e hicieron una cantidad de cosas tremendas para no me muriera. ¡Sin conocerme! Yo era el inquilino: nos habíamos visto un día antes cuando ellos me dieron la llave de la casita de huéspedes y nada más.
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etiquetas: infarto , alquiler , vivienda , montevideo , airbnb , empresa
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En menéame
-> www.meneame.net/story/escritor-hernan-casciari-sufrio-infarto-uruguay
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2015 -> www.clarin.com/sociedad/hernan-casciari-infarto-uruguay_0_Byue7vktwQe.
2016 -> www.clarin.com/sociedad/hernan-casciari-infarto-primera-persona_0_rk_9
Lo unico q no acabo de creerme es q no supiera absolutamente nada de esta movida cuando fue de nuevo a visitarlos 1 año despues
prueba a crearte una cuenta en issuu. Parece que hay un boton de descargas pero esta deshabilitado.
Los anfitriones tienen un sentido de la ética y de la moral que ya quisiera yo en mi familia política.
Una decisión moral suele estar mediatizada por el entorno social pero realmente esta gente actuó con una profunda humanidad y hombría de bien.
He sido testigo en un accidente de auto con gente tirada en el asfalto de como un medico traumatologo conocido mio a 3 metros de los accidentados se hizo el pelotudo y no dijo ni pio y cuando lo señale ante la policía comento que no tenia instrumental adecuado y que no quería comerse un juicio por praxis profesional asistiendo a los lesionados.
Desde entonces no me saluda, salvo en reuniones familiares de año nuevo.