Juan Carlos I consiguió en 2014 que el entonces sultán de Omán, Qabus sin Said Al Said, le comprara un ático de lujo en Londres valorado en 50 millones de libras, unos 62,7 millones de euros al cambio de la época. Su intención era instalarse en la capital británica justo después de abdicar. Llegó a amueblar y decorar la vivienda, un dúplex con amplias terrazas, máximas medidas seguridad y vistas al lateral sur de Hyde Park. Pero, en uno de los episodios más oscuros de la biografía reciente del Rey emérito, su conexión con esa propiedad se esfum
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etiquetas: emérito , ático
Ya cobró más de Omán por un chanchullo que como rey de España en 40 años.
Edito. Tienes razón, ya no me deja leerlo.
Si alguien puede leerlo que lo pegue en comentarios. Es una historia interesante.
El acuerdo era que el monarca podría utilizar el inmueble de forma completamente gratuita hasta el mismo día su muerte. Después quedaría bajo el control del Estado omaní, que lo usaría para alojar a sus propios mandatarios y diplomáticos. Juan Carlos I no tendría que pagar nada. De hecho, logró que su amigo Qabus bin Said Al Said pagara hasta las cuotas de la comunidad de vecinos y unas obras de reforma para su nueva residencia, que ocupaba los dos últimos pisos del número 5 de la calle Princes Gate, en el barrio de Knightsbridge, uno de los más cotizados de Londres, plagado de mansiones y embajadas y cerca de los grandes almacenes Harrods.
La casa más cara de Reino Unido
El importe de la compra batió un récord en el mercado inmobiliario británico, doblando el precio más alto que se había pagado hasta ese momento por una vivienda. Decenas de noticias informaron de este hito, aunque ningún medio consiguió identificar al futuro ocupante de la casa.
Sin embargo, Juan Carlos I cambió repentinamente de opinión. Había elegido Londres para estar cerca de Corinna Larsen, que vivía a 20 minutos caminando. Su antigua amante llegó a participar en la decoración del ático, a petición del monarca. Pero en 2015 la relación entre ambos se había roto definitivamente. Además, el Rey emérito había empezado a sufrir algunas estrecheces económicas tras la renuncia al trono. Algunos de sus históricos financiadores ya no encontraban razones para seguir sufragando su intensa vida privada. El monarca escribió al sultán y le comunicó que ya no quería vivir en el ático, sino los 62,7 millones de euros que había pagado por él. La noticia provocó un enorme malestar en Omán, pero el sultán accedió al deseo de Juan Carlos I. Una boda ofreció al monarca la oportunidad perfecta para… » ver todo el comentario
Para el ciclán de Franco eso no fue problema para imponernos de nuevo a la monarquía más ladrona de la historia de España
También es público que hizo más pagos millonarios a dicha amante de pago, así como que es público Y NOTORIO que le ha dado al putiferio de altísimo standing durante toda su vida a costa de lo que robaba en España. Algo que los borbones abanderan como tradición familiar, traicionar a España a cambio de dinero para sus pollas.
La monarquía más barata de España, la llaman por ahí.
"Juan Carlos I consiguió en 2014 que el entonces sultán de Omán, Qabus sin Said Al Said, le comprara un ático de lujo en Londres valorado en 50 millones de libras, unos 62,7 millones de euros al cambio de la época. Su intención era instalarse en la capital británica justo después de abdicar. Llegó a amueblar y decorar la vivienda, un dúplex con amplias terrazas, máximas medidas seguridad y vistas al lateral sur de Hyde Park.
Pero, en uno de los episodios más oscuros de la biografía reciente del Rey emérito, su conexión con esa propiedad se esfumó y 20 millones de euros desaparecieron por el camino misteriosamente. Ahora acaba de emerger el nombre de un actor clave en esa operación.
La compra del ático se cerró dos meses antes de la renuncia al trono, en una visita de Estado de Juan Carlos I a Omán. Solo unos días después de la proclamación de Felipe VI, un antiguo embajador del sultanato en Reino Unido, Hussain Abdulatif, abonó los 50 millones de libras a la empresa promotora de la vivienda, Coll Hill Spink Limited, como reveló El Confidencial y explica con detalle el libro King Corp. El imperio nunca contado de Juan Carlos I.
El acuerdo era que el monarca podría utilizar el inmueble de forma completamente gratuita hasta el mismo día su muerte. Después quedaría bajo el control del Estado omaní, que lo usaría para alojar a sus propios mandatarios y diplomáticos. Juan Carlos I no tendría que pagar nada. De hecho, logró que su amigo Qabus bin Said Al Said pagara hasta las cuotas de la comunidad de vecinos y unas obras de reforma para su nueva residencia, que ocupaba los dos últimos pisos del número 5 de la calle Princes Gate, en el barrio de Knightsbridge, uno de los más cotizados de Londres, plagado de mansiones y embajadas y cerca de los grandes almacenes Harrods.
La casa más cara de Reino Unido
El importe de la compra batió un récord en el mercado inmobiliario británico, doblando el precio más alto que se había pagado hasta ese momento por una vivienda. Decenas de noticias informaron de este hito, aunque ningún medio consiguió identificar al futuro ocupante de la casa.
Sin embargo, Juan Carlos I cambió repentinamente de opinión. Había elegido Londres para estar cerca de Corinna Larsen, que vivía a 20 minutos caminando. Su antigua amante llegó a participar en la decoración del ático, a petición del monarca. Pero en 2015 la relación entre ambos se había roto definitivamente. Además, el Rey emérito había
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Pero bueno, lo suyo igual es que lo valoren solamente los jueces puestos ahi a dedo por el PP, que seguro que son mas imparciales que los del PSOE claro...