Las declaraciones que han despertado las críticas fueron pronunciadas por el ministro el pasado sábado. Entonces, Cioroianu afirmó estar pensando en "si podríamos comprar un solar de tierra en el desierto egipcio a donde pudiéramos enviar a las personas que nos avergüenzan". Mientras, nueve asociaciones rumanas de derechos humanos enviaron hoy una carta al primer ministro rumano en la que solicitan que Cioroianu sea despedido por sugerir una medida que calificaron "de tipo nazi". Adrian Cioroianu pidió hoy perdón por sus declaraciones.
|
etiquetas: rumanía , inmigración