Hace unos días supimos la historia de 3 periodistas que fueron acosadas por aficionados en Rusia. Pero Miguel Álvarez, periodista mexicano, también fue acosado aunque su reacción fue diferente.
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etiquetas: mundial , rusia , periodista , méxico , acoso 
Un saludo a todos aquellos defensores de la igualdad.
Patético.
De esto trata el meneo que votaste irrelevante.
Relacionada:
www.meneame.net/story/maria-gomez-acosada-hincha-ante-camara-despues-p
Lo que se ve en el video es parte del documental que estoy realizando.
En este vídeo la misma chica de la noticia relacionada que te enlacé en el anterior comentario, María Gómez, le dice a un entrevistado que le llama guapa, que eso no hace falta que se lo diga:
www.youtube.com/watch?v=U7WCpt9tIDY
Supongo que porque tiene en mente lo sucedido días atrás, de todos modos, no creo que llamarle guapa a alguien sea motivo para hacer un feo en público.
Para el ejemplo de la reportera mujer de esta tarde, ella le ha parado los pies.
Otra cosa es la cuestión social. Si este señor Mexicano sale en su país ofendido por lo que han hecho este par de señoras rusas, van a cuestionar su sexualidad, ellos y ellas. Y esto lamentáblemente es así.
Si aquí a la señora reportera a la que le dicen guapa, independientemente de que le moleste a ella o no, no se planta a decirle al tipo que de guapa nada. La van a poner a caer de un guindo. Lamentablemente es así también.
Y por supuesto el tipo ha quedado como el machista heteropatriacal del año. Eso si no hacen una cacería twittera contra él para ver donde vive y a qué se dedica.
Solo hay que ver el vitoreado comentario de #9.
Necesitan venderse para quedarse cuando acabe el mundial.
El acoso físico a un hombre es hasta cómico porque, si quiere, se puede zafar con facilidad. Difícilmente va a temer por su vida. Podemos darle las vueltas que queramos: acosado por boxeadoras, por mil mujeres a la vez, etc. Pero eso sería falaz. El hombre en ese sentido parte desde una posición de poder.
Por poner un ejemplo del lado contrario (que toca de manera muy tangencial el asunto), la friendzone. Ser una mujer y tener un pagafantas me resulta siempre mucho más mezquino que ser un hombre y tener unA pagafantas. A nivel romántico/sexual/emocional, las mujeres tienen aquí la sartén por el mango (y el 99% lo sabe). Ahora está de moda criminalizar al pobre desgraciado que se ha enamorado, fantasea demasiado o simplemente quiere mandanga, pero estamos hablando de una relación consentida entre ambas partes que se acaba rápido con una conversación honesta. Si luego el chaval no lo acepta, ya es otra historia...
CC #13 #21
· Si es un hombre y lo rechaza, es un maricón.
· Si es una mujer y lo acepta, es una puta.
Hasta que no cambie esta mentalidad, la igualdad es una quimera.
Yo trabajo en EE.UU. y jamás le hago un comentario a nadie, del tipo que sea, ni bromas. En seis años en mi compañía actual me han tirado los tejos dos compañeras y una supervisora me invitó a su casa un par de veces. Tengo fama de soso, y me lo han dicho, "para ser español eres muy soso". Lo que yo contesto, "si participo en ciertos juegos y a alguien le sienta mal algo que yo haga, ¿me defenderás cuando empiecen a decir que soy el típico latino machista?"
Pues visto así también tienes razón.
Bien jugada la carta étnica. Eso es jaque mate.
Ahora tendrán que ascenderte.
Joder, cómo os flipáis, en serio. Yo le doy el significado que me parece a feminazi, y que explico en el anterior comentario, no sé ni quién es ese periodista ni me interesa.
Por cierto, si se asciende a los étnicos por ser étnicos, ¿por qué los consejos de administración de las grandes transnacionales están copados por hombres blancos?
En serio, a mí se me pasan guarradas sin cuento por la cabeza, pero entiendo que vivo en sociedad y que conseguir siempre lo que se desea lo vuelve a uno muy infeliz.
Las chavalas una vez paren de grabar pasarán de él y él cree que ya ha triunfado.
Si hubiera sido una mujer y un hombre se aprieta contra ella de esa forma eso sale en todas las televisiones del mundo y lS feministas estarian haboando de una muestra de machismo y del heteropatriarcado.