Si sois aficionados a las historias de tiburones, habréis escuchado alguna vez que un buen sistema para defenderse de un ataque es sacudirle un buen trompazo en el morro cuando se acerca. El biólogo marino Ben Ruttenberg relata en primera persona en Discover cómo tuvo que aplicar esta técnica de defensa mientras buceaba en Galápagos hacia el año 2000. Cuando leas lo que le sucedió a él, te cuento si es una buena idea.
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Edito: Coño! Si es tuya!!
Eso, metedles el dedo en el ojo con cariño.
Debe ser que estoy acostumbrado al mediterráneo y haberlos haylos pero pocos, aún así creo que si un día veo un tiburón mi instinto va a hacer que salga por patas y si me engancha, me acordaré de lo del ojo, más que nada por que como dice #7 eso vale para todos jaja
No todos los tiburones pueden arrancarte el brazo al primer mordisco.
Y contra un perro que arremete contra ti y ves que va a ser imposible librarte del mordisco, cierra el puño de tu mano mala y ofrecele el antebrazo para que muerda. una vez mordido, piquete a los ojos con la mano buena, pero con saña. ese perro no volvera a intentar morder, al menos, a un humano.
La otra opción para que vea quien es el macho es aparearse con sus hembras, pero esto ya es menos recomendable (en aguas profundas suele hacer frío y eso corta).
Por cierto, hay otra opción en estos casos:
oceana.org/en/our-work/protect-marine-wildlife/sharks/learn-act/shark-
jnkboy.deviantart.com/art/Haggar-piledriving-a-shark-202701148