#3 y #4 el problema está en la especulación y en lo que puse en negrilla. Esto lo hacen con la escusa de que es consecuencia de las renovables porque son inestables y entonces hay que almacenar cuando producen en exceso para liberar cuando hay carencia pero curiosamente al lado de las centrales de bombeo tienen una nuclear. Está claro que la energía se extrae de la nuclear.
Curiosamente ellos bombean cuando a ellos les sale más barato para vendernos después la energía cuando ellos ganan más. A eso se le llama especular: compro barato y te vendo caro.
A eso le sumamos que la energía extraída es menor, yo diría que considerablemente menor, a la gastada en el bombeo, por lo que perdemos energía.
Así que, primero, el único interés es ganar más dinero a costa de espacios protegidos o de jodernos el monte. Segundo, la solución no es bombear sino exportar la energía sobrante cuando haya exceso y poner a funcionar todo lo que sea posible cuando haya déficit o importar energía si no llega como ya se está haciendo. Y si se quiere almacenar energía, coño, que sea energía renovable y cuando estas produzcan en exceso y no nuclear cuando a ellos les sale más rentable porque toman el dinero de las subvenciones destinadas a las renovables para almacenar energía no renovable.
#5 Si nos leemos el artículo nos daremos cuenta de que "el problema de la variabilidad horaria de la demanda energética" hace años que está subsanado.
Igualmente no se ha aclarado si el uso de fármacos como oseltamivir (Tamiflu®) o zanamivir (Relenza®) puede prevenir el contagio.
Los medicamentos antivirales han demostrado muy poca eficacia en las infecciones por virus gripales comunes, disminuyendo menos de un día la duración de los síntomas. Respecto a esta gripe no hay estudios que demuestren su eficacia.
Los síntomas son los mismos que los de la gripe de todos los años. La gripe, como dice la sabiduría popular, “dura siete días con tratamiento y una semana sin él”.
La vacuna contra la gripe común no funciona para la gripe A. Aún no se ha terminado de desarrollar una vacuna para la nueva gripe con totales garantías de seguridad y efectividad. La situación actual, en relación con el número de personas afectadas y el número de muertes, no justifica una alarma social.