#47 De ahí que haya cierta ambigüedad en algunas expresiones, como "hacer un francés", lo cual podría provocar situaciones incómodas. Desde un punto de vista estrictamente historicista se podría entender como "darse la vuelta y que entren con todo".
#3 Rusia hizo una movilización de unos 350.000, a mediados del 22 para estabilizar y reestructurar el frente. Todos los demás, varios cientos de miles, son voluntarios, o PMC. Las levas de mili no van a Ucrania.
#0 Quasi errónea, Ucrania no va a negociar nada. Aquí no pinta nada más que sangre y huesos. No pudo negociar nada hace dos años, cuando aún tenía sus capacidades casi intactas, porque no les dejaron y menos ahora. Lo peor, siendo egoísta, es que ya se ha decidido la entrada de europeos al conflicto sin que tampoco nosotros tengamos nada que poder decidir.
#2 De momento le hemos echado los huesos de los saharauis para que se entretenga. Pero yo tengo claro que sí en algún momento un gobierno español decide defender nuestros intereses y deja de apoyar y sufragar guerras ajenas rápidamente nos montan un Maidan, o aparece el ISIS en Melilla, etc.
#1 Proxy, por sí mismo, no es malo. Hay proxies que apoyan un genocidio y proxies que intentan evitarlo. Hay proxies que buscan activamente la aniquilación de seres humanos inocentes y proxys que intentan evitar que los otros se puedan rearmar y recibir carburante para sus tanques y misiles.
No debe parecerle suficiente las páginas principales de los mayores periódicos del país, y decenas de programas televisivos, y el control de los noticiarios que necesita tomar represalias personales.
#4 Hay que perseguir el sionismo como se debió hacer con el nazismo. Eso incluye la desaparición del estado de Israel como expresión histórica de una ideología genocida.
#26 Cuando deslocalizaban sus fábricas para ganar más, genial, si luego otros resultan más productivos o de mejor calidad entonces arancel que te clavo.
#10 Querrás decir a los capitales occidentales que producen en esos países. La cosa no va de enriquecer a los agricultores marroquíes sino a las multinacionales agropecuarias occidentales.