- Los padres tal y como está la cosa trabajan más por menos sueldo. Más complicado conciliar vida familiar y laboral.
- Los niños tienen más tareas que antes, en mi caso no paraba de jugar por las tardes y bajar a la calle. Ahora está muy complicado.
- Cada gobierno implanta su reforma educativa y a los profesores los vuelven locos. Y los profesores vuelven locos a padres y alumnos. Nuevos libros, que si los otros ya no valen.
Las editoriales ganan mucho, los políticos redactan las leyes sin consultar a profesores, directores, padres. Consiguen que los padres se enfrenten con los profesores y viceversa, cuando el problema está más arriba, siempre lo está y nunca aprendemos.