El biólogo estadounidense George Divoky es un testigo único de los cambios en el Ártico. Durante los últimos 37 años de su vida ha pasado cada verano, solo, estudiando una colonia de aves marinas en la isla de Cooper, al norte de Alaska. Desde su base en una modesta cabina, Divoky ha compartido el día a día de las aves conocidas como araos aliblancos o Black guillemot en inglés (cepphus grylle) que se reproducen en la isla. El derretimiento del hielo en el Ártico ha tenido efectos dramáticos, según Divoky: la escasez de alimentos ha causado..