edición general
  1. @vejeke Pero algo cambió drásticamente, llegó PODEMOS y polarizó por completo el debate político, que si ya venía siendo un asunto cada vez más relevante, tras la llegada del partido que absorbió casi de lleno toda crítica social, se acabó convirtiendo en un tema omnipresente en la página. Para evitar esa polarización y solucionar el acuciante aumento de los comentarios blanqueados "injustamente" (según el espectro político desde el que se miraran) se tomó la medida de restar fuerza al voto negativo para castigar menos "al disidente" y fomentar la pluralidad. Como casi todo en esta vida tiene efectos secundarios, aquellos otros comentarios en plan "a los gitanos habría que..." o "yo no soy machista porque ayudo en casa, pero..." fueron paulatinamente teniendo más visibilidad, los negativos correctivos ya no causaban el efecto de antes y la chusma se envalentonó.

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  1. @vejeke Hace unos años la famosa "mafia" (siempre me hizo gracia ese nombre) estaba absolutamente dividida y repleta de opiniones de lo más variado. Por ello, ni era mafia ni era na. No pasaba de un chiste, que además sonaba bastante ridículo o patético y en ocasiones triste (por decirlo suavemente) cuando algunos individuos se quejaban de la supuesta "sensura" que esta malvada organización ejercía desde la sombra sobre ellos, pobres incomprendidos. Lo peor es que la mayoría de quejas, que a veces conseguían sublevar al personal, enmascaraban otros intereses. Solían quejarse precisamente tras haberlos pillado con multitud de clones, o haciendo SPAM, etc.

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    1. @vejeke Que menéame ya no es lo que era (lo que quiera que eso signifique) se lleva diciendo desde 2007 o incluso antes: www.meneame.net/story/meneame-no-es-lo-que-era Meneame ha dejado de ser lo que era tantas veces que uno pierde la cuenta. Es evidente que todo en esta vida cambia, tanto por dentro como fuera. -Aún recuerdo cuando un amigo pensó que andaba metido en una página de test de conducir porque Eli tenía aquella L verde.- Y sé que después de ver tanta mierda llega un punto en que la gente se cansa y se va perdiendo la paciencia. Lo sé sobre todo porque mi padre ha sido profesor de instituto y lo que es peor, uno con ganas de que sus alumnos aprendieran. Se que con el tiempo actitudes y opiniones de las que antes se pasaban de largo, dejan de tener gracia y comienzan a irritar. Pero tomarse las cosas a la tremenda no ayuda a nada, no cambia nada (que es lo peor) y solo agria.

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menéame