edición general
  1. El año 1939 Ruíz de Albéniz publicaba al Heraldo de Aragón el siguiente texto:

    "Yo lo llevaba fijo en mi mente el día 26 cuando con las tropas de Juan Bautista me metía en el Tibidabo, en Pedralbes. No quería hacerme ilusiones. Están vencidos y soportarán, porque son gente despierta, su derrota y nuestro triunfo; pero…¿convencidos?…ah! eso ya es más difícil . Quizás imposible. Barcelona seguirá siendo el garbanzo negro de la olla nacional. Por lo menos durante un par de generaciones. Al enjuiciar así el problema catalán del presente y el porvenir, no era ciertamente de los más pesimistas. Yo he oido a más de una persona de claro juicio y temple sereno propugnar la conveniencia de un castigo bíblico (Sodoma, Gomorra) para purificar la ciudad roja, la sede del anarquismo y separatismo , y como único remedio para extirpar esos dos cánceres, señalar el termocauterio destructor implacable"

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