El pensamiento y conocimiento occidentales tienden a estar construidos predominantemente bajo la premisa de que se puede pensar y examinar todo a distancia, desde una posición incorpórea, libre de sesgos e idealmente objetiva. Eso, la teoría.
La realidad es que objetividad poca, que históricamente dicho pensamiento y conocimiento se ha emitido en su mayoría por posiciones de poder ocupadas por una élite de hombres blancos de ciertas culturas. Y a partir de determinado momento, diversos movimientos han expuesto esto desde puntos de partida y problemáticas variadas. Y, a grandes rasgos, han llegado a la conclusión de que lo de presentar tu discurso como objetivo es el peor tipo de subjetividad posible. Porque va a tener sesgos igual, pero encima, te crees que no los tiene, o intentas convecer a otros de ello.
Lo decía porque quienes se aferran al marco anterior pueden considerar como un ataque que les señalen que emiten sus ideas desde cierta posición, que creen objetiva. Mientras quienes están por el cambio consideran relevante y necesario valorar desde dónde opina cada uno, porque influye...
@nilien@alalimayallimon Pues yo creo que es una simple excusa para descalificar personalmente al que no opina exactamente igual que tú, porque usar un argumento es más difícil, ya que requiere analizar lo que ha escrito el otro y responder acorde a eso que se ha escrito. Si por el contrario usamos la excusa de "es que es no sé qué" (que podría ser hasta mentira), no tenemos que hacer ningún esfuerzo.
Que tampoco es que haya dicho nada del otro mundo, porque me contesta a un comentario donde digo que no es normal mostrar ese odio. Yo no sé el resto, pero en mi día a día no veo eso, y con temas muchísimo más graves.
Cree que sí es normal ese odio? Ok, pues vale. Supone que me tenga que descalificar personalmente porque digo que no es normal mostrar ese odio? Parece que sí.
(Pequeña) observación sobre esto...
El pensamiento y conocimiento occidentales tienden a estar construidos predominantemente bajo la premisa de que se puede pensar y examinar todo a distancia, desde una posición incorpórea, libre de sesgos e idealmente objetiva. Eso, la teoría.
La realidad es que objetividad poca, que históricamente dicho pensamiento y conocimiento se ha emitido en su mayoría por posiciones de poder ocupadas por una élite de hombres blancos de ciertas culturas. Y a partir de determinado momento, diversos movimientos han expuesto esto desde puntos de partida y problemáticas variadas. Y, a grandes rasgos, han llegado a la conclusión de que lo de presentar tu discurso como objetivo es el peor tipo de subjetividad posible. Porque va a tener sesgos igual, pero encima, te crees que no los tiene, o intentas convecer a otros de ello.
Lo decía porque quienes se aferran al marco anterior pueden considerar como un ataque que les señalen que emiten sus ideas desde cierta posición, que creen objetiva. Mientras quienes están por el cambio consideran relevante y necesario valorar desde dónde opina cada uno, porque influye...