edición general
  1. @kekobola Lo malo de esta historia donde contaba haber estado a punto de atropellar a un ciclista es que es real, solo que el ciclista era yo.

    Lo bueno es que pese haberme descrito en el otro papel, en el del conductor homicida imprudente, dos usuarios me han votado positivo, y ahora ya sé con quién se puede contar en caso de tener que enterrar un cadáver en un descampado sin hacer preguntas.
  1. @kekobola Te voté sobre todo por que esto me pareció muy bueno:

    A la velocidad que yo llevaba, el antibloqueo no me ha impedido rebasar el carril bici en varios metros, pero al menos sí ha evitado el escandaloso chirriar de neumáticos. Tecnología para tragedias más silenciosas.

    Por lo del cadáver, si eso le ponemos zapatos de cemento y lo echamos al lago. Más limpio y más descansado.
    1. @ailian La verdad es que todavía estoy temblando y hoy no me podido volver a subir en la bici. En un primer momento el sentimiento de furia hacia el conductor fue tremendo, pero después quise pensar que podía ser un tipo normal, incluso una buena persona, con sus problemas, principios y conciencia, e imaginé cómo habría vivido él un susto así.

      PS: Para lo del cemento y el lago no hace falta que sea cadáver al principio.

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