He quedado con el amigo cabrón que me ha llamado a las 10:00 y me he tomado un vermú, una caña con champiñón y alioli, y para terminar ración de pulpo a la gallega con un txakoli gipuzkoano. Después he ido a casa de mi madre a comer: ensalada de tomate con pimientos, tazón de caldo de pollo, plato de callos y un poquito de empanada de setas y pollo. Tengo de postre una caña de chocolate para tomar con el café. Igual me muero con 50 años, pero al menos no moriré con hambre.
Te mueres por andar comiendo mierdas crudi-veganas todo el día y por hacer dietas depura-karma y que luego venga un autobús y te pase por encima. Por eso sí te mueres.