Un Parlamento, y por extensión el Gobierno, debe emplear todos los esfuerzos a su alcance para dar explicaciones sobre todo, cuantas veces haga falta, contestando a las preguntas de la prensa o de quienes se lo requieran. Los políticos, en cambio, repiten una expresión que revela que están ocultando algo, que detrás hay motivos más hondos imposibles de explicarse sin escándalo: "Las medidas/decisiones que tomamos son dolorosas pero necesarias". Acaso sea la expresión más infame e impertinente de cuantas se emplean en política.
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