Volar en helicóptero hasta una cumbre remota y salvaje para lanzarse en un descenso vertiginoso en bici o con esquís: un sueño para muchos amantes de los deportes extremos, pero una aberración para muchos montañeros o ecologistas.
|
etiquetas: deporte extremo , ecologismo , pirineos
Errónea o sensacionalista.
¡Pero hace falta ser julay!
En el Pirineo aragonés ves cada carro que alucinas. Los más modestos, no falla, suelen ser los de los franceses.
Esta moda es dañina por partida doble: por alterar la paz de la montaña con helicópteros ruidosos, y porque bajan a toda velocidad ciclistas por caminos que a menudo no son aptos.