Introducción Roma siempre fue un pueblo terrestre, pese a ello, necesitó desarrollar una gran flota. Ya en la Primera Guerra Púnica, se vio obligada al desarrollo de una armada para poder combatir a Cartago. Con todo, no será hasta los tiempos de Augusto que esa flota tendrá una importancia real en los asuntos del Estado Romano. Sin su flota, Roma no podrá proteger las rutas comerciales que proporcionaban grano a la ciudad. Durante el bajo imperio, cuando poco a poco la flota fue desapareciendo, el hambre, la incertidumbre y la inseguridad …