Cada vez hay más personas que no saben qué quieren hacer con su vida o qué es lo que realmente les gusta. Si se les pregunta qué les gusta y qué no les gusta, estas personas suelen admitir que no lo tienen claro porque tampoco se lo han planteado en profundidad. En este artículo Izumiya Kanji, un psiquiatra que trata a diario con pacientes que se hallan ante este tipo de dudas, habla de los orígenes de esta situación y el modo de salir de este círculo vicioso.
|
etiquetas: desmotivación , psiquiatría , vida , motivación voraz , alexitimia
Por desgracia, muchos adultos siguen creyendo que la educación consiste en formar a camellos obedientes y diligentes. Por eso cuando llega el día en que nos cuesta oír la voz de nuestro corazón, corroída por la pasividad, debemos detenernos a escuchar bien hasta que logremos oír ese “no quiero” del rechazo y usarlo para despertar poco a poco el espíritu rebelde del león. Para ello, cuando nos disponemos a hacer algo, tenemos que distinguir si lo hacemos porque nos lo pide el corazón o porque nos lo ordena la cabeza. En el caso de que la decisión provenga de la cabeza, debemos consultar a nuestro corazón para ver qué le parece. Con esta sencilla acción interna estaremos mostrando respeto al corazón, al que hemos ignorado durante tanto tiempo. Y, al fin, el asfixiado corazón recuperará su energía para revelarnos su voluntad sin vacilar.
#8 a mí también me parece que es bueno
Ah,... Me suena a algo de TDT. ¿Sigue existiendo?
Por desgracia, muchos adultos siguen creyendo que la educación consiste en formar a camellos obedientes y diligentes. Por eso cuando llega el día en que nos cuesta oír la voz de nuestro corazón, corroída por la pasividad, debemos detenernos a escuchar bien hasta que logremos oír ese “no quiero” del rechazo y usarlo para despertar poco a poco el espíritu rebelde del león. Para ello, cuando nos disponemos a hacer algo, tenemos que distinguir si lo hacemos porque nos lo pide el corazón o porque nos lo ordena la cabeza. En el caso de que la decisión provenga de la cabeza, debemos consultar a nuestro corazón para ver qué le parece. Con esta sencilla acción interna estaremos mostrando respeto al corazón, al que hemos ignorado durante tanto tiempo. Y, al fin, el asfixiado corazón recuperará su energía para revelarnos su voluntad sin vacilar.
#8 a mí también me parece que es bueno
Así que me puse a, lo que algunos llaman reflexionar y, voila, una vez supe lo que quería de una forma concreta, todo parecía más claro.
Ahora, por muy "mal" que parezca que estamos, lo tenemos todo a nuestro alcance. Tenemos la educación y todos los caprichos de los que nuestros padres/abuelos han carecido. Y, viviendo así, en la "abundancia", como dice el artículo, propicia a perderse. Esa ausencia de motivación, de retos, de lucha, creo que viene por ahí. Y al final, la pregunta es... "Y ahora qué?" Todos hemos estudiado/formado en una profesión, trabajo, coche, hipoteca, hijos... Y cuando "llegas" y cumples todo lo que te han dicho, la pregunta es la misma... Y ahora qué?
Si nos faltaran muchos de los privilegios y oportunidades de los que tenemos ahora, no habría este problema. Es por pura supervivencia. O lo haces, o te mueres... Ahora en nuestros días, si no lo haces... Pues seguramente tus padres/familia o la sociedad lo hará por tí, entonces... Qué sentido tiene? Para qué hacerlo?
El artículo postula que la crisis existencialista que sobrevuela sobre muchos de nosotros tiene un origen en la educación que hemos recibido y apela a la necesidad de rebelarse para completarse como persona. Yo, en cambio, veo que otros de los factores de la crisis existencialista es la falta de expectativas provocada por la situación economicosocial, aunque creo que la solución también parte de la necesidad de rebelarse.
Estamos amaestrados, somos camellos. Si se protesta tiene que ser sin molestar mucho. No me hagas un piquete, ni me cortes una carretera. Protesta, pero en tu casa, a los demás no nos molestes. Y no se te ocurra pasarte, porque sino te vamos a joder la vida aunque solo te hayas dedicado a tuitear.
Aplaudimos como imbéciles que metan en la cárcel a políticos que abogaban por hacer un referéndum y lo aderezamos con un "así es la ley", "así son las cosas". Nada cambia, nada se puede cambiar. Pero todo va a peor. ¿Y nosotros que hacemos? Nos dejamos arrastrar por la corriente y relativizamos las cosas: no todos los polis son malos, España es un estado de derecho, separación de poderes... Y así tragamos con infinitas tonterías que realmente no toleraríamos si tuviéramos una mínima perspectiva de futuro. Pero no la tenemos, no tenemos nada por lo que arriesgar nuestras vidas por ello. Y tragamos.
Y claro, luego viene el típico listillo que nos vende un futuro mejor y ya tenemos a media Cataluña que se hace independentista. Y en vez de entender por qué ocurre esto nos dedicamos a insultarles, a llamarles xenofobos, racistas, insolidarios. ¿Como no va a crecer el independentismo si el presente es una mierda? ¿Como no va a crecer si la solución que se plantea a la mierda que es el presente es tirandole más mierda en forma de represión? ¿En que momento nos hemos resignado a la represión como algo "natural"? ¿En que momento hemos aceptado como sociedad la tesis de que el hombre es un lobo para el hombre? ¿Realmente lo creemos? ¿Nuestros iguales, por los que hace 80 años moríamos en las barricadas, son lobos? Por favor...
m.youtube.com/watch?v=g1D9R2dDFXA
(unos catolicos echando pestes de la ingeniería social programada moderna sin reconocer la ingenieria social programada arcaica del catolicismo en la que vicen y a la que se someten o han sometido sin enterarse supuestamente)
Burros persiguiendo una zanahoria colgada sin alcanzarla nunca. Y entrenando a los hijos para que la persigan.
El club de la lucha, Tyler Durdeen:
“La publicidad nos hace desear coches y ropas, tenemos empleos que odiamos para comprar mierda que no necesitamos. Somos los hijos malditos de la historia, desarraigados y sin objetivos. No hemos sufrido una gran guerra, ni una depresión. Nuestra guerra es la guerra espiritual, nuestra gran depresión es nuestra vida. Crecimos con la televisión que nos hizo creer que algún día seriamos millonarios, dioses del cine o estrellas del rock, pero no lo seremos y poco a poco nos hemos dado cuenta y estamos, muy, muy cabreados.
No sois vuestro trabajo. No sois vuestra cuenta corriente. No sois el coche que tenéis, ni el contenido de vuestra cartera. No sois vuestros pantalones. Sois la mierda cantante y danzante del mundo."
www.meneame.net/search?u=capitan__nemo&w=comments&q=danzante
Balad conmigo beeee, beeee, ...
Primero que enseñen y formen a los padres para que sepan lo que quieren y lo que son. Para que no vuelquen sus frustraciones y sus deseos y ansias (y el lavado de cabeza recibido) en sus hijos.
Creo que la vida no consiste en tener claro todo, pues eso conlleva renunciar a casi todo, sino en disfrutar un poquito de lo que nos va ocurriendo. Los infelices a los que pretenden ensalzar como referente social hoy en día no son sino gente con problemas obsesivos tales como el que se murió de Apple o el maniaco de los coches autoconducidos.
No os dejéis engañar: no tener demasiado claro lo que se quiere es lo más normal del mundo.
Padres y madres que creen que saben pensar por si mismos, pero si lo supiesen de verdad sus hijos e hijas no tendrían esos problemas que describe el psiquiatra este. Esa "fuerza", "capacidad", o "habilidad" se hubiese filtrado sin quererlo de los padres a los hijos. Pero no se puede filtrar lo que no se tiene.
Fuera aparte (esto es otra cosa)
Que fluya el cariño de padres a hijos y de hijos a padres. Ese sistema está muy muy atascado muchas veces. No fluye como debiera. Hay un problema de comunicación en el que principalmente lo que no fluye bien es el cariño y el amor (asuntos puede que de inteligencia emocional y comunicación emocional)
Normalidades patologicas en muchas, muchisimas familias.
Padres y madres que piensan que no pueden aprender nada de sus hijos e hijas, y se niegan a hacerlo, no se lo permiten, no entra en su ideología de lo posible. Son padres, se supone superiores, les tienen que respetar (y se piensan que si se mostrasen como ignorantes en muchas cosas como es normal perderian esa autoridad) Pero es un escudo que se implementan por el miedo y angustia que les produce ser padres. Se escudan en ese halo de falsa superioridad contagiada quizas de sus propios padres. Como el profesor que teme decirle a un alumno, no lo sé, cuando este le hace una pregunta. Vive escudado de un miedo, afectado por el sindrome del impostor. Atrapado en sus miedos a que parezca que no sabe ¿Un profesor que no sabe?¿Permitirse decir que no sabes?¿Mostrarse humano?¿Mostrar una debilidad humana?
Sociedades que viven en normalidades patologicas.
Una vez garantizado eso, podemos pasar a "lo que queremos hacer con nuestra vida".
No tienes que ser el CEO de Apple, tu pasión puede ser hacer pan.
Cierto, la gente en general es muy vanal y vacíos interiormente o mejor dicho se llenan con un móvil, un coche, con cosas materiales que dido mucho que llene el interior. Muchas cosas en este vida ahora son pensando “en qué dirán” y poco en hacer lo que me gusta.
Lamentablemente poca gente se puede dedicar profesionalmente a su pasión. Y los que pueden hacerlo rara vez pueden ganar un sueldo digno con ello.
Pero es que aunque lo consigas, probablemente no sea algo tan disfrutable como cuando lo hacías por hobby porque tienes que hacerlo por obligación.
Yo estuve en una situación de elección similar en mi vida y al final decidí dedicarme a algo que aunque no me apasiona, no me termina de disgustar y las condiciones son muy buenas. Y creo que he hecho lo correcto.
Me permito corregirte , ¿a tu estilo , no ?
Es como si ambos problemas que plantea, esos y los que supuestamente pertenecen al momento actual de un exceso de dirección ajena sobre tu propia vida, tuvieran ambos la misma raíz, esa falta de autonomía/rebeldía que luego destaca. Es decir, si te preocupa demasiado tu reconocimiento social me parece que igualmente estás bastante en fase-camello que diría el articulista.
Si tuviera lo básico asegurado me podría dedicar a hacer lo que me apetece y me daría igual tener que comer arroz todos los días.
Es como, aquel slogan de "El Club de La Lucha" de "Trabajamos en lo que odiamos para comprar basura que no necesitamos" me resulta siempre un tanto ajeno; si, ya, ojalá fuera así y no fuera para obtener lo básico, hasta tal punto que empiezas a tener en España el fenómeno de la gente que no las cubre aunque tenga empleo.
Pero creo que el artículo es muy acertado: la sociedad vive saciada. Saciados sus estómagos, saciada su sed de información a un click, saciada de ocio,... ¿Por qué elegir un plato del menú, si puedes comer de buffet libre?
Aparte está la evitación de compromisos: no me caso, que no sé cómo puede irme en el futuro con esta pareja. No me compro casa, que no sé si voy a poder pagarla. No me acomodo en esta ciudad, que no sé si dentro de unos años me iré a trabajar a otra. Si ni siquiera afianzas una seguridad de base en tu vida, es complicado plantearte metas por las que luchar.
Si sabes lo que quieres hacer, no hay preguntas.
Por todo lo demás está el manido mantra de la sociedad consumista del persigue tus sueños. Pues cuidado que si son imposibles es muy probable que se queden en imposibles y seas un amargado de por vida.
Insisto: El 99% de la gente con la que he hablado del tema, o se dedica al nihilismo, o a la crianza de una nueva generación (lo que yo llamo la opción "patadón adelante") o está mas perdido que un político el dia del padre. Me alegra que tu te des al nihilismo (la opción más racional, en mi humilde opinión)
El nihilismo niega lo que pretenda un sentido superior, objetivo o determinista de la existencia puesto que dichos elementos no tienen una explicación verificable. En cambio, es favorable a la perspectiva de un devenir constante o concéntrico de la historia objetiva, sin ninguna finalidad superior o lineal. Es partidario de las ideas vitalistas y lúdicas, de deshacerse de todas las ideas preconcebidas para dar paso a una vida con opciones abiertas de realización, una existencia que no gire en torno a cosas inexistentes.
Por lo poco que me has dicho te pega bastante
Bonus track:
www.youtube.com/watch?v=NLF7ndFgFSE
En fin, no te sientas mal
Yo creo que la crisis existencialista tiene más que ver con la naturaleza del ser humano que con la educación o vida modernas. Siempre ha habido un vacío que llenar, gente que no tenía claro su objetivo en la vida y cada uno lo ha resuelto como ha podido (familia, dinero, poder, religión...). No creo que haya existido jamás una sociedad sin estos problemas.
Es normal que la gente se ilusione con alguien que le vende un futuro mejor: Es lo que han hecho siempre las religiones y los políticos.
Y lo de "el hombre es un lobo para el hombre" pues sí es cierto. A ver: En el ser humano conviven un montón de actitudes aparentemente contradictorias: p.ej. cooperación y competición y todas forman parte de ser persona. Por muy buenas personas que queramos ser siempre habrá competición... por trabajo, poder, parejas...
Pienso que va de luchar por lo que sueñas, en vez de aferrarte a esa seguridad que da ser "un camello" y seguir todos los pasos que te van marcando, como se hacía antes cuando los caminos no estaban tan marcados. Creo que va de volver a sugerirnos que le preguntemos a nuestro corazón qué deseamos de verdad y revelarnos ante la "sensatez" de las "vías marcadas" que te sugiere el cerebro.
Creo que habla de esas generaciones que nacieron con todas las necesidades cubiertas, no solo "cosas", sino la seguridad de una casa, comida todos los días, seguridad, saber que iban a poder ir al cole, saber que iban a poder volver, a tener amigos, que iban a poder ir a las actividades extraescolares, que luego irían a la uni, que luego encontrarían trabajo si seguían los pasos adecuados. Esa generación que, aunque no tuvieran mucho dinero o "muchas cosas", sí sabían qué carril iban a caminar, porque "así se hacen las cosas" para que todo vaya de la forma que mejor funciona. Nos sugiere que salgamos de la vía del camello y nos enfrentemos a la revelión del león para enfrentarnos con curiosidad y con energía a las cosas que, de verdad, nos gustan.
Pide solo que nos atrevamos a salirnos de las vías que nos han marcado
La sociedad de consumo vino después ( o se solapó con ella), cuando se tenían todas las necesidades cubiertas y se empezó a gastar dinero solo por consumir otra cosa más de esas que no se necesita (cambiar de móvil solo porque ha salido el nuevo modelo aunque el otro sigue estando "nuevo", comprarse ese coche de más caballos de los que caben en un sueño para ir al centro comercial a hacer la compra del mes o para lucirlo el fin de semana...) .
Luego, llegó la crisis. Y la sociedad de consumo siguió "viviendo un poco de las apariencias" (ya no se comía lo mismo, pero el coche seguía siendo nuevo) y la del bienestar se perdió entre tanto recorte para llegar a esto de hoy en el que la gente no llega a cubrir las necesidades básicas aunque tenga trabajo.
Yo quiero vivir en la sociedad del bienestar, donde las necesidades de todos estén cubiertas y donde todos accedamos a servicios públicos de calidad sin importar nuestra nómina. Y sin que nadie se quede fuera por cuestiones económicas o por cualquier otro factor discriminatorio.
Solo pide que te preguntes, de verdad, a cada paso si realmente quieres hacer eso. Y que te contestes escuchando a tu corazón al hacerlo.
No que sigas por la inercia o que te quedes sin hacer nada o que sueñes sueños por los que no vas a poder luchar.
Bueno, cada uno interpretamos las cosas de diferente forma.
Yo lo he entendido más como que hoy, la mayoría de los pasos hasta una determinada edad son fijos y no requieren ninguna decisión activa de quien los da. Y esos pasos van abriendo y cerrando puertas que nos dirigen como en una vía a un puesto determinado en la sociedad.
Y la mayoría los sigue por "inercia" sin plantearse si realmente quieren hacer ese camino. Por ejemplo: pasar por la universidad, sea cual sea el título al que se opte. ¿Porqué seguir esa vía haciendo una carrera que lleva a un lugar donde no se quiere trabajar? Solo dice que la gente piense un poco, lo del león : ¿realmente eres tú quien quiere estudiar X o es tu entorno quien te está diciendo que "eso es lo tuyo"? . Y si te niegas, puedes decidir algo que, tal vez, a tí te motive más: abrir tu propio negocio de Y, acceder a otra formación diferente a la universitaria para hacer eso que te gusta más.
Creo que va más por ahí, por tomar decisiones activas en los pasos que damos en la vida y que dejemos de ir por las vías de la inercia que nos marca la sociedad en que vivimos. Porque, además, creo que ese es el problema: muchos no saben lo que quieren porque no se han parado a preguntarse qué quieren, solo han seguido esas vías que otros les han dicho que funcionan.
Y creo que habla de revelarse a la comodidad de pasar por las puertas que te han abierto otros y elegir plantearte en cada una si quieres o no seguir por ahí.
Los japoneses también tienen esos "carriles" por los que se puede ir creciendo y pasando etapas, sin plantearse demasiado cada decisión.
Lo que yo creo es que debemos recuperar pensar si queremos dar ese siguiente paso que nos proponen o dar uno diferente, en España y en Japón.
Porque si nos lo planteamos, el paso que demos será un paso consciente y más deseado, sea cual sea, con lo que haremos "con más ganas" lo que hayamos decidido hacer.
La felicidad puede estar en sentirte a gusto con tus compañeros y contigo mismo, en oler ese pan recién hecho, en echar una carrera con tu compañero para ver quien llega antes al próximo contenedor, en saber que con esas piezas montarán algo útil.
Tal vez puedas sentirte feliz sabiendo que tienes un papel en la sociedad (aunque no seas Steve Jobs) haciendo que la comida sea más atractiva con tu pan al lado, o que tu ciudad esté más limpia después de que tu pases, o sabiendo los usos que le dan a las piezas que montas.
Y no sé, tal vez, si solos haces tu hobby, acabes perdido y vacío sin encontrarle sentido a ese hobby y, un buen día, cuando termines alguna de las etapas de ese hobby, digas ¿y ahora qué?
Creo que la felicidad no es solo hacer "lo que te apasiona" en todo momento, sino, simplemente, sentirte a gusto con lo que haces, saber porqué lo haces y saber que tú lo has elegido.
Eso sí, entre las Space operas la música que mola más es la de Star Wars.
Lo mejor para ser un don nadie y que muchos por el camino se hayan beneficiado de ti.
SIn duda, entre las space operas, la música de Star Wars es la mejor