El Gobierno ha llegado a la conclusión de que no puede prohibir a ningún Ayuntamiento que una calle de su municipio lleve el nombre de un militar golpista. Pero sí pretende hacer una recomendación a todas las autoridades locales y autonómicas -que tendrá carácter de orden para los organismos estatales- para que eliminen todos los símbolos y monumentos que elogien a golpistas o ensalcen el espíritu del golpe de Estado de 1936. Via
bifri.net/story.php?id=431