En la Holanda ocupada, los nazis llevaban a prisioneros hasta una zona llena de dunas al norte de La Haya y allí los asesinaban y enterraban en fosas comunes. El tiempo habría hecho imposible reconocer a los muertos. Piet Kuijt era jardinero o agricultor, tenía permiso de los alemanes para trabajar allí. Con algún tipo de patrón en la plantación que nadie más conocía y que jamás compartió, iba señalando donde habría fosas. En 1945, tras la guerra exhumaron 270 cuerpos, excepto 27 los demás pudieron ser identificados y entregados a sus familias.
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Si no voy equivocado esas dunas fueron el destino final de Hannie Schaft
es.wikipedia.org/wiki/Hannie_Schaft
No tengo ni putísima idea de lo que estoy diciendo, pero podría ser una explicación bastante sencilla.
Muchas personas tienen necesidad de hacer un duelo, enterrar a sus muertos...Seguro hubo gente que se quedó esperando a quien no volvió y vivió con mucho dolor no tener ni opción a esa última despedida (los entierros son eso, un cierre y un empezar a sanar). Quizás ese que fue borrado en la vida y en la muerte le importaba a los suyos. A veces esa historia pasa incluso de generación en generación y si tienes oportunidad de cerrar esa herida familiar y honrar a los tuyos con un entierro, ¿qué tiene de malo?
Este jardinero seguro pensó en esos que esperaban.
Los "colaboracionistas" suelen serlo por diferentes motivos: por afinidad ideológica, por simpatía por el enemigo, o por coincidencia en los objetivos, aunque también pueden serlo por coacción o incluso por miedo.
En tiempos de guerra colaboración es colaboración, todo lo que no sea resistencia se considera colaboración, así de jodidas eran las cosas