Científicos del Instituto Max Planck de Neurobiología han descubierto que los ratones dominan el pensamiento complejo y observado cómo representan la información abstracta a nivel neuronal. Los ratones categorizan la información sensorial como los seres humanos y la representan como abstracción en la misma región cerebral que usamos los humanos para el pensamiento complejo. Incluso pueden equivocarse, como nosotros. Esto ha puesto de manifiesto que los pensamientos complejos no son exclusivos en nuestra especie.